Durante esta jornada, dirigentes de la Fenats Nacional Región de Los Lagos dieron a conocer que se abrió una causa judicial, luego que se denunciara que existiría una bóveda sellada bajo el Cosam (Centro Comunitario de Salud Mental) Oriente.
El recinto fue construido en el terreno del ex Hospital San José de Osorno, donde funcionó un centro de tortura y detención durante la dictadura militar, según consta en el Informe Valech.
Así lo informó Óscar Riveros Araya, dirigente de la Federación Metropolitana de la Fenats Nacional y de la Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud, quien leyó la declaración pública respaldada por diversas organizaciones gremiales de la región, fuera del citado Cosam ubicado en calle Angulo, entre Los Carrera y Germán Hube (Santa María).
Afirmó que “este es un proceso que venimos elaborando para llegar a este comunicado, una vez que se han establecido los rangos mínimos para hacer una denuncia de esta envergadura”, lo que subrayó dice relación con el respeto a las familias de detenidos desaparecidos pues, si bien no existe certeza de lo que puede haber en esa bóveda, la ocurrencia de hechos de este tipo genera gran expectación.
Añadió que el ministro en visita extraordinaria para causas de derechos humanos de las Cortes de Apelaciones de Temuco, Valdivia, Puerto Montt y Coyhaique, Álvaro Mesa Latorre, está a cargo de la investigación en la que dijo “hay gente que ha sido interrogada, que ha colaborado”, pero declinó entregar mayores antecedentes pues indicó que se les ha pedido cautela.
Recordó que en el marco de una fiscalización realizada por obras que no habían sido terminadas, dirigentes de la Fenats regional destacaron que los trabajos del Cosam Oriente sí habían concluido en corto tiempo y cumpliendo “con toda la normativa”, siendo inaugurado a fines de 2019.
Riveros señaló que luego de ello dos dirigentes de la región fueron contactados por un profesional que trabajó tanto en la demolición del edificio que existía en calle Angulo como en la construcción de centro comunitario de salud mental.
Agregó que a este testigo, “que es parte de la causa y cuya identidad está protegida”, le produjo sorpresa que no se le haya permitido derrumbar una de las tres bóvedas existentes en el terreno, pues la norma de construcción en Chile no permite edificar algo sobre una estructura ya existente.
Riveros comentó que al profesional “se le plantea, de manera tajante, que él tiene que terminar la obra sin derrumbar eso y poniéndole tierra y cemento encima”, por lo que precisó que la bóveda, que además era la más grande de las tres, quedó a dos metros de profundidad.
En cuanto a quién habría dado esa orden, afirmó que ese antecedente está “en poder del ministro que está investigando la causa y no estamos autorizados para entregarlo”, insistió.
Y sostuvo que ahora se entiende “el porqué de la persecución tan profunda, con el objetivo de destituir a los seis dirigentes de la federación”, la que indicó habría sido ejercida por el Servicio de Salud de Osorno y por el director del Hospital Base de Osorno. “Es algo que no tiene ningún parangón en la historia de la organización nacional”, acotó el dirigente metropolitano de la Fenats.
DEBER DE INFORMAR
César Garcés, dirigente de Federación de la Fenats Nacional Región de Los Lagos, fue una de las personas contactadas por el testigo, lo que dijo ocurrió a fines de julio de este año y realizaron la denuncia dos semanas después de conocidos los hechos.
Tras señalar que no podían hacer una denuncia sin interiorizarse acerca de lo que está sucediendo, contó que en ese contexto recibieron información de una persona que fue víctima de tortura política en el recinto del ex Hospital San José, quien además les dio el contacto con el ministro Mesa.
En este punto Garcés recalcó que, tal como lo señalaron durante esta actividad Angélica Veloso Santana, presidenta de Fenats Región de Los Lagos, y Óscar Riveros, “no hay nada que nos asegure 100% que ahí haya gente muerta o detenidos desaparecidos en el área”.
En esta línea, tras contar que la tercera bóveda nunca fue abierta y que las otras correspondían a una caldera y pabellones, dijo que el juez tiene la información respecto de qué dependencia del antiguo hospital existía en el espacio sellado, de acuerdo a los planos del recinto, lo que Garcés dijo conocer pero no puede revelar. “Nosotros como testigos también tenemos todos los antecedentes”, afirmó.
Asimismo, junto con descartar que estén jugando con los sentimientos de las familias de víctimas de la dictadura militar, debido a que no hay certeza de que haya restos humanos en ese lugar, el dirigente de la Fenats regional sostuvo que “cuando hablamos de detenidos desaparecidos es porque hay argumentos para hacerlo. No vamos a entregar una causa sin tener los datos que, por lo menos, den un indicio de que existió algo”, enfatizó.
Además, recalcó que “como funcionarios públicos no podemos ocultarlo. Si a nosotros nos entregan esta información tenemos el derecho y el deber de informarlo a la justicia, y eso es lo que estamos haciendo”. Acotó que este es un tema muy delicado y que están cargando “una mochila muy pesada”, pero reiteró que “es necesario que la comunidad se entere”.
Asimismo, adelantó que presentarán una querella que indicó tendría como objetivos que “los responsables salgan a la luz y que paguen lo que corresponde”, como también “poder entregar tranquilidad a las familias, si es que ahí hubiera restos de víctimas de la dictadura militar”, y paralizar las obras que se desarrollan a un costado del Cosam Oriente. “Si ocultaron esto por cerca de 50 años, creo que a esta altura uno puede esperar cualquier cosa”, declaró.
Y precisó que el hacer público estos hechos les permitirá generar dicha querella, pues expresó que “en este momento, no estamos como testigos protegidos y sí tenemos nuestros resquemores (sic) a nuestra integridad. Mal que mal tenemos 16 sumarios administrativos, dos querellas criminales y todo va relacionado a estas obras”, concluyó César Garcés.
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