Grupo de Arabia Saudita conoce experiencia de investigadores ULagos con macroalgas

Los profesionales, integrantes de una importante universidad, una empresa de acuicultura y del Ministerio de Agricultura y Medioambiente, replicarán en su país lo aprendido en el Centro i-mar.

Viajaron más de 14 mil kilómetros, atravesaron desierto, mar y cordillera, para concretar uno de los sueños más importantes de sus vidas: conocer en terreno y en un trabajo práctico cómo se trabaja en Chile con las macroalgas.

Se trata de un equipo proveniente de Arabia Saudita, que llegó hasta el Centro i-mar de la Universidad de Los Lagos para aprender a través de la experticia de los investigadores de esta instancia, encabezados por el profesor Alejandro Buschmann.

Quien lideró este viaje, fue el chileno radicado en Arabia Saudita, Gabriel Castro, biólogo marino y profesor de la Universidad de Ciencia y Tecnología KAUST, que figura entre las 20 mejor rankeadas en el mundo en cuanto a postgrados, por su fomento tanto a la investigación como al desarrollo científico y tecnológico. 

El grupo de jóvenes profesionales de la universidad KAUST planificaba desde hace años este viaje, que no estuvo exento de dificultades, especialmente administrativas debido a la pandemia y especialmente a la diferencia cultural que existe entre ambos países.

Según comentó el profesor Castro, fue una verdadera preparación al interior de las familias, quienes mantienen estrictas costumbres religiosas que en cada parte del viaje y de la estadía en este país también debieron mantener. Es por ello que las y los jóvenes arribaron acompañados de dos guardias religiosos, condición básica para autorizar el viaje.

Proyecto

El académico explicó que esta visita se enmarca en un proyecto de Investigación y Desarrollo (I+D) sobre algas y biotecnología, que debe culminar en productos específicos ya intervenidos en Arabia Saudita. 

La iniciativa es auspiciad y dirigida por el Ministerio de Agricultura y Medioambiente, ejecutada por la citada Universidad KAUST y cuyos resultados de la investigación serán utilizados por la empresa acuícola NAWA 

“Los visitantes llevarán a cabo todo el proceso de desarrollo de macroalgas, y el estudio de investigación respecto de las especies nativas de Arabia; el escalamiento de las mismas; el estudio genético, morfológico, y todo lo que va a referir a las técnicas de cultivo masivo”, explica el profesor Castro.

Añadió que, además, las tres microbiólogas de la universidad asiática aprenderán las técnicas generales de las especies nativas chilenas, que van a tener que reproducir con las especies de allá

Al respecto, el profesor del Centro i-mar Alejandro Buschmann, quien además integra el Centro Basal de Biotecnología y Bioingeniería (CeBiB), explicó que el viaje se concreta luego de que su par en Arabia lo contactara para generar esta alianza.

Acotó que incluso el profesor Castro visitó en diciembre la Universidad de Los Lagos para afinar todos los detalles. Más adelante será el profesor Buschmann quien deba viajar, para conocer cómo han aplicado en Arabia los conocimientos aprendidos.

Experiencia

Ya en la Región de Los Lagos, el viaje se inició el 25 de mayo en Puerto Montt. Fueron tres semanas de capacitación, talleres, visitas a centros de cultivo que permitieran llevar a cabo este intercambio tecnológico sobre las macroalgas, entendiendo que en Arabia Saudita cuentan con el Mar Rojo como fuente de alimento para el futuro.

“Son bastantes distintas las macroalgas que existen en Arabia Saudita, en el Mar Rojo a las que existen en Chile. Sin embargo, las técnicas y las referencias de todos los investigadores que participan son bastante interesantes, entonces estamos recibiendo conocimiento de ellos en torno a las técnicas de cultivo de macroalgas en sus diferentes fases, desde el tema genético, taxonómico, hasta cultivos masivos”, comenta el profesor Castro.

En tanto, el docente de la ULagos expresó que, si bien las algas son otras, hay técnicas para manipularlas, para el trabajo en laboratorio que son parecidas, con algunas diferencias por su tipo de organismo, pero con una base similar y por lo tanto mucho material es transferible. 

Agregó que no hay muchos países tropicales que tengan una instalación muy fuerte en cultivo de algas. Si bien Indonesia y Filipinas producen mucho, ellos usan tecnologías que son muy simples, parecido a lo que hacemos acá con el pelillo (Gracilaria). Y, por lo tanto, no hay un fuerte desarrollo biotecnológico con capacidades en genética que estén reunidos en una institución, que permita hacer una transferencia ideal.

“Esas han sido las razones de por qué llegar acá y poder hacer este primer curso e iniciar este trabajo”, concluye el profesor Buschmann.