Por Roberto Cadagán/Ilse Sepúlveda
“Cuerpo de Bomberos de Osorno. @Bomberos_Osorno. Calle: JOSE ABELARDO NUÑEZ 271. Esquina: SANTA MARIA. Rotura de termómetro. Comuna: Osorno. Sector: Fuera de sector. Vehiculos: H-2”.
Este aviso de emergencia es real. Ocurrió en Osorno y acudieron bomberos de la Segunda Compañía de Bomberos.
Aunque no genera revuelo en la comunidad, se activan una serie de procedimientos por la rotura de termómetros, debido al derramamiento del mercurio que contienen estos aparatos.
En los últimos años son bomberos de las unidades Hazmat los que concurren a estas situaciones, aunque años atrás no era algo habitual que estos efectivos acudieran ante estas situaciones.
La falta de información hizo que muchas personas manipularan el mercurio sin saber que se necesitaba tomar medidas de precaución adecuadas, eliminándolo por vías habituales en el hogar: la basura o el desagüe.
Hoy los antecedentes disponibles confirman la precaución que se debe tener al estar en contacto con este químico. Por lo mismo, se ha hecho necesario que personas con equipos adecuados manipulen y recepciones finalmente este material.
Hazmat es la abreviación de las palabras en inglés hazardous material (materiales peligrosos).
Las emergencias a las que concurre bomberos de Valdivia y de todo el país han variado con el tiempo. En sus inicios sólo bastaba con tener la preparación y equipamiento para incendios de casas, negocios y para el salvamento de personas.
El crecimiento industrial generó nuevos riesgos y emergencias en que se involucran grandes instalaciones y volúmenes de materia prima e insumos. Un ejemplo clásico son los incendios de hidrocarburos, que generaban gran cantidad de llamas y densas nubes de humo.
La respuesta de bomberos ante esto fueron los carros químicos de la primera mitad del siglo XX.
Sin embargo, las informaciones daban cuenta de que en distintos países se producían emergencias que involucraban a otras sustancias y no solo en incendios, cuyas características explosivas, inflamables, corrosivas, venenosas o radiológicas significaban grandes daños a instalaciones y maquinarias.
No cualquier bombero puede hacer frente a una emergencia química, cualquiera sea la índole de esta. Es por eso que en Osorno la Segunda Compañía de Bomberos tomó la responsabilidad de adecuarse a los estándares internacionales para hacer frente a estas situaciones.
Por casi 20 años, dicha unidad está enfocada a atender emergencias químicas, en particular por la potencial liberación de sustancias químicas pudiendo afectar tanto a personas, bienes y el medio ambiente.
Estas se presentan en una infinidad de escenarios y magnitudes. Desde emergencias domiciliarias, en la vía pública o carretera, como en grandes industrias y plantas de procesos, donde pueden ser originadas de un accidente vehicular, un incendio u originado por la fuerza de la naturaleza.
Esta unidad además de atender emergencias en Osorno también presta apoyo a comunas vecinas dentro de la provincia tanto en emergencias como en capacitación.
El capitán de la Segunda Compañía, Cristian Riquelme, informó a Grupo DiarioSur que “realizamos cursos de especialización tanto nacional, a través de empresas de capacitación en el área como con la academia dependiente de la Junta Nacional de Bomberos de Chile”.
“Además, hemos participado en capacitaciones en Venezuela, Brasil y Estados Unidos, como también hemos podido traer instructores tanto de empresas como bomberos de Estados Unidos, en particular Texas y Houston, de Colombia y Brasil”, agrega.
Riquelme dice que además de la capacitación es importante el entrenamiento, para lo cual regularmente los voluntarios realizan actividades y simulaciones para estar siempre activos con los conocimientos y técnicas para eventuales emergencias.
“Un punto importante es el trabajo coordinado con instituciones asociadas a nuestro accionar como Seremi de Salud, de Medio Ambiente y la Superintendencia de Electricidad y Combustibles, además de las diferentes empresas que almacenan y trabajan con materiales peligrosos”, señala.
Así conocen sus instalaciones o procesos y generan la coordinación para dar una mejor respuesta en caso de una emergencia química.
-¿Cómo es el nivel de equipamiento de la unidad osornina?
“Estamos dotados de equipos y herramientas para la detección de sustancias químicas, ropa de protección química, equipos para la protección respiratoria, sistemas de descontaminación, herramientas para confinar y contener liberaciones o derrames de sustancias.
Todos estos elementos son de alto costo, los cuales permanentemente deben ser mantenidos o repuestos cuando se dañan o deterioran, además requieren que nuestros bomberos estén altamente capacitados para hacer correcto uso de ellos".
-¿Cuáles son las principales emergencias químicas que se generan en la provincia?
“Principalmente atendemos emergencias domésticas. Las más frecuentes son liberación de gases, de envases de gas licuado, natural, de descomposición provenientes de los alcantarillados o cámaras domiciliarias. Las más complejas son aquellas donde se ven involucrados vehículos de transporte de combustible, productos de uso industrial, como amoniaco, cloro, ácido nítrico, ácido clorhídrico, agroquímicos entre otros”.
-¿Qué recomendación se le puede hacer a la comunidad osornina?
"Lo primero, es para las personas en sus domicilios. Realizar instalaciones de gas con artefactos y personal certificado por la SEC, hacer mantenciones, revisiones periódicas a sus instalaciones.
“En caso de tener alguna emergencia tratar de evitar exponerse innecesariamente, proteger a sus familias, evacuando el lugar afectado, llamar al 132 y tratar de dar la mayor información posible a la central de alarmas para que podamos responder de la mejor manera a cualquier evento que pueda afectar a la comunidad”.
La rotura de un termómetro antiguo en la urgencia infantil del Hospital Base Valdivia movilizó a los voluntarios de la sexta compañía.
El mercurio que contienen estos aparatos -no los digitales- y que también puede encontrarse en algunas ampolletas de luz fluorescente, algunos interruptores eléctricos, barómetros, tensiómetros y también en aleaciones llamadas amalgamas.
Es un metal líquido a temperatura normal de color blanco plateado, brillante y denso que se encuentra en la naturaleza en estado puro o combinado con plata.
Actúa como una neurotoxina y afecta a las personas de diferentes formas según la edad, peso y estado de salud. Es riesgoso principalmente en fetos y recién nacidos.
Los vapores de mercurio ingresan al cuerpo a través de los pulmones o la piel, afectando a los sistemas nervioso e inmunológico, el aparato digestivo, la piel, pulmones, riñones y ojos.
Para estar atentos e informados, estos son algunos de los síntomas que pueden presentar las personas que han estado expuestas a la acción del mercurio de manera prolongada y/o aguda:
Temblores; cambios emocionales (como cambios de humor, irritación, nerviosismo, timidez excesiva); insomnio; cambios neuromusculares (como debilidad, atrofia muscular, espasmos); jaquecas; perturbaciones en las sensaciones; cambios en las respuestas nerviosas y desempeño deficiente en evaluaciones de función mental.
Mayores exposiciones también pueden afectar a los riñones de manera severa, causar insuficiencia respiratoria e incluso la muerte.
¿Qué hacer en caso de estar expuesto a mercurio en el hogar?
La rotura de un termómetro es algo que también puede pasar en muchas casas que aún poseen estos aparatos antiguos. Por eso, en caso de verse enfrentado a esta emergencia, bomberos recomienda realizar las siguientes acciones:
Ventila el área afectada, evacue la zona afectada, no expongas a niños, embarazadas o personas con salud deficiente; llama a bomberos para el control del producto, y en lo posible, no utilices termómetros o artefactos que contengan este metal.
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