Este domingo 22 de septiembre, el vicario general, padre Cristian Cárdenas leyó el decreto de nombramiento, correspondiente a la designación del padre Miguel Iván Molina Molina como el nuevo párroco de la Parroquia Sagrada Familia en Río Negro.
En la instancia, el sacerdote pronunció la fórmula de su procesión de fe y el juramento de fidelidad, donde recibió las llaves del templo por parte del obispo de Osorno, Carlos Godoy Labraña, quien demás hizo entrega del Cáliz y la Patena.
“Los invito primero a que demos gracias al Señor nos ha elegido y nos ha llamado para ser sus amigos y discípulos especialmente en este viaje. Yo he aprendido que hay que agradecerle a Dios ese infinito amor y la paciencia que tiene para cada uno de nosotros”, expresó el nuevo párroco.
“El Señor ha dispuesto ponerme aquí para caminar con ustedes, siendo ante todo un hermano y un servidor, le doy gracias por este regalo y por la firmeza y la claridad de su Evangelio que hemos leído, que me deja clarito a mí y a todos, lo que espera de nosotros, de mí especialmente en este tiempo y a lo largo de mi vida. Me confío a sus oraciones para que pueda ser fiel al Señor y lo que me vuelve a encomendar ahora, la vida y misión de esta querida comunidad de Río Negro”, agregó el padre Miguel.
En el nombramiento también estuvieron presentes el vicario general de la Iglesia osornina, el padre Peter Kliegel Stiller, el padre Dennis Paredes Barría, la coordinadora de la comunidad parroquial, Jessica Vidal Bittner y la religiosa Sagrario Bastidas López, de las Hermanas de la Caridad del Sagrado Corazón de Jesús.
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