Alcalde de Coyhaique organiza bingo para pagar sueldos en educación

Con desesperación el jefe comunal aseguró que organizarán un bingo para reunir fondos y pagar una millonaria deuda en educación en la comuna. Revisa las declaraciones del alcalde en la nota.

Una compleja crisis económica es la que actualmente atraviesa la educación municipal en Coyhaique. La situación que asegura a el alcalde Carlos Gatica, los ha llevado a tomar medidas extremas, como organizar un bingo para pagar el sueldo de diciembre de los docentes municiaples.

Si bien hoy se vislumbra un estado financiero crítico, el problema existiría hace al menos una década, establece el jefe comunal en entrevista con Diario Regional Aysén.

Esta desesperada solicitud de ayuda para solventar los gastos educacionales en Coyhaique, inevitablemente traen a la memoria las polémicas declaraciones del entonces ministro de educación en 2018, Gerardo Varela.

"Y yo me pregunto, ¿y por qué no hacen un bingo? ¿Por qué desde Santiago tengo que ir a arreglar el techo de un gimnasio". Cuatro años más tarde, la municipalidad de Coyhaique deberá recurrir a un bingo para pagar su déficit en educación.

"Estamos planificando hacer un bingo para pagar el déficit en la educación porque nos significa un problema mayor. Hoy no tenemos escapatoria, no tenemos ninguna solución por parte del Gobierno", lamenta Gatica.

“Tenemos este déficit hace más de 10 años, que los arrastramos todos los años y tenemos que sacar recursos del fondo común municipal para poder ir a ayudar a la educación, el tema es que se ha agravado más y cada vez teníamos que poner mayor cantidad de recursos”, detalla.

Y agrega: “El año pasado colocamos una cantidad, pudimos salvar el año, pero este año se agravó porque subieron los costos enormemente, en lo que es el gas, petróleo, combustible, los insumos. El Banco Central proyectó para este año un IPC del 5%, pero vamos en el 13%, todo ha afectado”.

El aumento del déficit -explica la autoridad- sería estructural, lo que se explicaría por los egresos permanentes y filos, que son las remuneraciones y gastos operacionales.

A lo que añade: “Los ingresos que se pagan por concepto de asistencia de alumnos, han reducido porque también ha habido una marginación del sistema público al sistema particular subvencionado y particular importante, entonces cada vez recibimos menos recursos, pero los costos operacionales no cambian, por lo tanto, la diferencia y el déficit es cada vez mayor”.

En esa misma línea, el alcalde detalla que el egreso operacional del municipio de Coyhaique es de $1.150 millones mensuales, lo que se contrapone a los $900 millones mensuales que el Ministerio de Educación destina por conceptos de subvención.

“Por lo que hay $250 millones que tengo que sacar del fondo municipal, de las rentas que el municipio percibe, para solucionar este problema”, establece Gatica.

Tocando puertas

Respecto a las respuestas por parte del Gobierno, el alcalde lamenta que a pesar de las diversas reuniones que han sostenido con autoridades a nivel nacional, aun no han tenido respuestas.

“El 1 de junio supimos que teníamos el problema y el 15 fuimos al Senado, en la comisión de educación y de zonas extremas. Estuvimos con la senadora Provoste, la senadora Órdenes, también y con el ministro Ávila y ahí personalmente le expusimos este problema”, enfatiza Gatica.

En las reuniones, el alcalde asegura que fueron sinceros y que plantearon su necesidad de apoyo para solventar los gastos.

“Creíamos que iba a ser noviembre y diciembre, hicimos un esfuerzo y pudimos pagar noviembre, pero desde ya veníamos hablando que teníamos problemas para financiar la educación en esos tiempos”.

No obtante, siguieron tocando puertas, en julio llegaron hasta la Cámara de Diputados, donde expusieron el problema al ministro Ávila y al subsecretario Nicolas Cataldo.

"Hemos hablado con el delegado presidencial, con la seremi, el 30 de agosto fuimos al Ministerio de Educación, estuvimos con el ministro de Educación y el diputado (Miguel Ángel) Calisto (DC)", detalla con angustia el alcalde.

“Nos sentimos total y absolutamente abandonados por parte del Gobierno y en medida desesperada no sabemos que más hacer, no hay más plata en el municipio de donde podamos sacar para poder cumplir con esta obligación tan importante que son la salud, las pensiones de los trabajadores”, lamenta.