Es un pequeño pueblo ubicado dentro de la jurisdicción de la comuna de Purranque, en la provincia de Osorno, pero que guarda los nada despreciables 97 años de fundación, ese es Corte Alto, un asentamiento humano que creció durante el auge del ferrocarril en la zona sur.
Fundado un 25 de marzo de 1924, nace bajo el alero de la Estación Corte Alto que ya existía desde 1913 y que a partir de 1940 fue cabecera del ramal Corte Alto-Los Muermos, parte del Troncal Sur. El ramal conectó las actuales comunas de Purranque, Frutillar, Fresia y Los Muermos, aunque su trazado original planteaba llegar hasta el sector de Lepihué en la comuna de Maullín. Su trazado en parte se alineaba con el antiguo camino real de la zona, construido en la época colonial.
La estación de trenes aún sigue en pie, pese a que los ajetreados días del tren ya son cosa del pasado, pues la estación de pasajeros dejó de funcionar en 1983.
Según el profesor Manuel Loaiza, natural de la localidad, Corte Alto fue fundado por el agricultores como José Mansilla y Guillermo Schmidt, quien como muchos campesinos, comenzaron a trabajar la explotación de la madera a comienzos del siglo XX. El mismo docente en sus estudios señala que el nombre del pueblo se deriva de esa actividad maderera, pues se cuenta que se tuvo que cortar un cerro para facilitar el paso de la línea férrea y, posteriormente el traslado de la madera.
Otra empresa que es importante en la historia de Corte Alto es la primera sociedad molinera Hoffman y Kahler, además del Comité de adelanto, cuyo presidente fue Adalberto Rosas.
Actualmente Corte Alto es el típico pueblo apacible del sur de Chile, pero, como ya vimos, guarda mucha historia para contar en su propia gente.
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