Historias DiarioSur
Por Pablo Santiesteban , 11 de marzo de 2021

Pampa Irigoin: 52 años que no borran ni toda la lluvia del sur

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Puerto Montt salió a la calle a despedir y repudiar la matanza de Pampa Irigoin. Al lado, el diputado Luis Espinoza, quien apoyó a los pobladores en su sueño de tener una vivienda propia.
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[#HistoriasDiarioSur] El hecho más vergonzoso y doloroso de la historia de Puerto Montt ocurrió el 9 de marzo de 1969 cuando en el desalojo de una toma se asesinó a 10 pobladores y se hirió a 56 personas.

Es difícil recordar un hecho como este que sin duda es uno de los más dolorosos y vergonzosos de la historia de Puerto Montt y que aún está latente en la memoria popular, la tristemente célebre matanza de la Pampa Irigoin, ocurrida hace 52 años, un 9 de marzo de 1969.

Ocurrió bajo la presidencia de Eduardo Frei Montalva y dejó un saldo de diez pobladores muertos, entre ellos un bebé de 9 meses que murió a causa de los gases lacrimógenos que lanzaron fuerzas del orden en un desalojo que se salió de control y se volvió violento.

A principios de 1969 Puerto Montt empezaba a surgir con fuerza como una ciudad líder del sur de Chile, sin embargo aún vivían los dramas del desastre que significó el terremoto de 1960 donde la Población Modelo sufrió el deslizamiento de la ladera donde estaba asentada y muchas personas murieron sepultadas y otras perdieron sus hogares, tal como ocurrió en otros sectores populosos como Angelmó o el barrio Chorrillos-Miraflores. Muchas personas se quedaron sin el sueño de su hogar en Puerto Montt en esa década del sesenta.

TERRENOS BALDIOS

Los terrenos de la Pampa Irigoin eran de propiedad de Rociel Irigoin Oyarzún, un conocido agricultor y comerciante de Puerto Montt, y era un terreno baldío ubicado en el sector alto de la ciudad. 

Según se decía esas tierras no eran aptas para la agricultura, pues eran pantanosas y húmedas y sólo se usaba para que los animales de la feria de Osorno fueran a pastar. Un año antes, en 1968, se produjo una toma en ese sector por un grupo de unos 70 pobladores que formaron un comité de los sin casa y que apoyó el regidor y recién elegido diputado socialista Luis Espinoza. La idea de estas familias era obtener una expropiación legal por no uso del terreno y así poder construir sus casas, ya que la legislación chilena de la época lo podría permitir. 

Esos primeros pobladores eran principalmente campesinos que llegaron a vivir a la ciudad y vivían en condiciones precarias. En diciembre de 1968 hubo conflictos con carabineros, pero igual se permitió que se les entregaran los terrenos, pero con la condición de pagar una cuota del 10 por ciento del valor real de esas tierras. La situación se complicó más aún cuando a comienzos de 1969 llegaron 150 individuos más a ocupar los terrenos y el 4 de marzo la situación se salía de control cuando llegaron otras 400 personas más a vivir a la Pampa Irigoin.

Por aquellos días se decía que ya estaban avanzadas las conversaciones con el Ministerio de Vivienda para la compra del predio y la construcción de una población Corvi.

Desde el comienzo la ocupación del terreno fue pacífica y no hubo ninguna reacción violenta de los pobladores como de los Carabineros, por lo que nadie se imaginó que iba a ocurrir un desalojo y que todo iba a decantar en una tragedia. Un día antes de la matanza un mayor de Carabineros, en compañía del diputado Espinoza, habló con los pobladores y les aseguró que al otro día iban a empadronar a las familias y que el problema de la toma se iba a solucionar. También se había hablado con el intendente subrogante Jorge Pérez Sánchez y éste le dijo a los dirigentes de esas 90 familias que lo más probable era que los iban a reubicar a una zona más segura.

Los primeros cuatro días de la toma pasaron tranquilos, pero eso cambió en el quinto día. Se dio la orden de desalojo por parte del intendente subrogante, previa autorización del Ministro de Interior Edmundo Pérez Zujovic. Alguien no quería que los pobladores se quedaran en esos terrenos y que se llegara a un acuerdo con ellos.

A LAS 7 DE LA MAÑANA

En las últimas horas del sábado 9, el gobierno del presidente Eduardo Frei Montalva decretó el Estado de Emergencia en la provincia de Llanquihue, reforzó al número de carabineros y ordenó la detención del regidor y diputado electo Luis Espinoza. El diputado socialista fue detenido en la localidad de Llanquihue y fue conducido al cuartel de la policía civil de Puerto Montt, sindicado como agitador de la toma.

Eran las 7 de la mañana del domingo 9 de marzo de 1969 cuando 250 carabineros ingresaron a la Pampa Irigoin a desalojar a las familias. La idea era encontrar durmiendo a las familias para evitar que haya resistencia, pero los pobladores tenían un sistema de alarma artesanal, unas latas amarradas con alambres a baja altura y ese precario sistema los alertó de que algo estaba ocurriendo en el campamento.

Los carabineros entraron lanzando bombas lacrimógenas y quemando las modestas casuchas que habían hecho los pobladores. Como el ruido y los gritos aumentaron ese domingo los vecinos de las poblaciones aledañas fueron en ayuda de los de la toma y se defendieron con palos y piedras hasta que unos carabineros, aparentemente atemorizados y sorprendidos de la reacción de los vecinos, abrieron fuego con ametralladoras y varios hombres y mujeres cayeron heridos.

Las víctimas fueron Luis Alderete Oyarce (19 años), José Aros Vera (27 años), Federico Cabrera Reyes (24 años), Jovino Cárdenas Gómez (29 años), José Flores Silva (19 años), Arnoldo González Flores (34 años), Robinson Montiel Santana (9 meses), David Montiel Valderas (34 años), José Santana Chacón (64 años) y Wilibaldo Vargas Vargas (31 años).

Hubo otras 56 personas heridas de los pobladores y 23 heridos de entre el grupo de Carabineros.

REACCIÓN

Todo el mundo político criticó la situación y al ministro Edmundo Pérez Zujovic. Ni siquiera su propio partido, el Demócrata Cristiano, salió en su defensa.

El entonces senador Salvador Allende, quien había visitado la toma de la Pampa Irigoin, hizo un discurso incendiario en el Senado sobre los hechos acaecidos en Puerto Montt y criticando el arresto del regidor Espinoza.

El músico Víctor Jara, conmovido por lo ocurrido, creó la canción “Preguntas por Puerto Montt” donde sindica al ministro Pérez Zujovic como principal responsable del hecho de sangre. Se dice que montó en cólera, tomó su guitarra y se dio a la tarea de hacer una canción de denuncia y criticando lo que consideraba un doble estándar y la distorsión de valores de la sociedad chilena de esos años. 

Con voz cargada de emoción y dramatismo canta: 

“Usted debe responder, Señor Pérez Zujovic:

¿Por qué al pueblo indefenso contestaron con fusil?

Señor Pérez su conciencia la enterró en un ataúd

Y no limpiarán sus manos ni toda la lluvia del sur

Ni toda la lluvia del sur”.

El día de los funerales de las 10 víctimas todo Puerto Montt se despobló para decir adiós a las víctimas en un hecho que quebró la convivencia de la ciudad en aquellos años. 

EPÍLOGOS DE SANGRE

Dos años después de la matanza, un 8 de junio de 1971, bajo el gobierno del presidente Salvador Allende , una célula de la Vanguardia Organizada del Pueblo (VOP) asesinó a Edmundo Pérez Zujovic, justificando sus acciones como venganza por la masacre de Puerto Montt. Los investigadores localizaron al comando armado y mataron a tres de ellos: los hermanos Ronald y Arturo Rivera Caderón y Heriberto Salazar Bello.

En 1973, posterior al Golpe Militar, el diputado Luis Espinoza fue detenido y ejecutado el 2 de diciembre de ese año en Frutillar. Su caso se encuentra consignado en el Informe Rettig de la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación y en 2019 se condenó a 18 años de presidio a los autores de su homicidio.

Los oficiales de carabineros coronel Alberto Apablaza y el mayor Rolando Rodríguez fueron retirados de la institución policial, mientras que el intendente subrogante Jorge Pérez Sánchez se retiró de la política, se dedicó a la abogacía y nunca fue juzgado por la responsabilidad que le recaía haber autorizado el desalojo. Falleció en 2016.

Actualmente se levanta la calle José Miguel Carrera en los terrenos aledaños a lo que fue la Pampa Irigoin. Aún viven ahí muchos de los pobladores de esa toma y que siguen cargando con el triste recuerdo de esa mañana del 9 de marzo de 1969.

 

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