Hans. Ese era el nombre del perro que falleció la noche de Año Nuevo en Puerto Varas, a consecuencia del uso de pirotecnia por parte de particulares, convirtiendo su triste historia y a esta ciudad en trendic topic durante esta jornada.
El hecho fue dado a conocer por el portal Club de Emergencias Décima Región, que consignó que “Hans tuvo que ser abrazado mientras tiraban los artificios porque estaba desesperado, de pronto cayó y no se pudo hacer nada”.
La historia fue recogida por medios nacionales, en algunos de los cuales se informó que el fallecimiento de la mascota se había registrado en el marco de un show pirotécnico organizado por el municipio de Puerto Varas, cuyo portal institucional descartó tajantemente que ello fuera cierto.
Junto con lamentar profundamente la muerte de Hans, en el barrio Las Brisas de la ciudad, en dicha página web se explicó que no realizaron una actividad de este tipo, “por cuidado de aforo, del medioambiente y de decenas de personas con espectro autista que sufren en estas circunstancias”.
Al respecto, esta jornada el alcalde Puerto Varas, Tomás Gárate Silva, criticó que “hay mucho uso de pirotecnia ilegal, no autorizada, por parte de particulares, lo que pone en peligro a nuestra comunidad de varias maneras”.
En este contexto, recordó que “hay personas neurodiversas que tienen condiciones especiales, a quienes les afecta de gran manera este tipo de artefactos”, a la vez que recalcó el impacto que esto genera en la fauna nativa y en las mascotas.
Asimismo, el jefe comunal fue más allá y sostuvo que “necesitamos una legislación más fuerte y también mayor capacidad de fiscalización y cooperación de las policías, para así poder enfrentar con fuerza este fenómeno que aqueja a muchos vecinos y vecinas, no solo de Puerto varas, sino que también de todo un país”.
DAÑOS
Sobre este tema, y para quienes dudan de los efectos que la pirotecnia puede causar a las mascotas, cabe recordar lo señalado días antes del Año Nuevo por María José Ubilla, presidenta nacional del Colegio de Médicos Veterinarios y subdirectora de la Escuela de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales de la Universidad de O'Higgins.
Refiriéndose a este tema, la profesional había afirmado que "los animales domésticos y la fauna silvestre sufren por la pirotecnia”, y enfatizó que “experimentan estrés y miedo. Frente a estos estímulos estresores, pueden aumentar su frecuencia cardíaca”, subrayó Ubilla.
La presidenta nacional del Colegio de Médicos Veterinarios además había agregado que a raíz de la pirotecnia, las mascotas pueden mostrar comportamientos alterados, por ejemplo, “temblando, vocalizando, perdiendo el control de sus esfínteres y/o manifestando conductas de escape", comentó.
REACCIONES
Estas son algunas de las reacciones que provocó este hecho en Twitter:
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