El aumento de emergencias por inflamaciones de estufas a pellet es una realidad que ha debido enfrentar este año el Cuerpo de Bomberos en diversas ciudades del sur, confirmó el comandante valdiviano Guillermo Müller Verdejo.
El directivo ratificó que “efectivamente estamos ante un aumento de este fenómeno. Este tipo de estufas ha entrado en una suerte de moda, mucha gente la está comprando porque tiene la gran ventaja que te evitas, por ejemplo, picar leña, hacer astillas o el tema derechamente de tener que hacer el fuego. En algunas incluso, con una app, puedes activar el encendido fuera de la casa y al llegar la encuentras con una temperatura mucho más agradable”.
Pero a esas ventajas del producto, también se adicionan una serie de riesgos, asociados en su gran mayoría a una instalación y a un uso inadecuado, sostuvo Müller en conversación con el Diario de Osorno.
“Estos equipos cuando son de marca confiable, en general resultan de buena calidad. Pero la recomendación que hacemos desde Bomberos es que la instalación sea hecha por personal calificado y que sepa, porque no es sólo cosa de colocar un cañón y un enchufe”, advirtió.
También Bomberos recomienda que el uso se sujete a lo indicado por el fabricante.
“Es importante que se haga lo que dice el manual del equipo. Por ejemplo, si dice que debes alimentarla con un tipo de pellet, o una cantidad y frecuencia determinada, hay que cumplir eso, porque muchas de las fallas pudieran generarse cuando no se respetan las funciones y las características del equipo”, señaló.
Qué Hacer
El comandante de Bomberos llamó a la comunidad a que “en caso que aparezca alguna anomalía, como salida de humo, que la llama crezca o se vuelva incontrolable, que marquen el 132 y van a ser derivados a la central de alarmas que los va a orientar (sobre qué hacer) y además en paralelo se hará el despacho de los carros bombas que van a salir a atender la emergencia”.
Müller reconoció que el crecimiento de los llamados de emergencias por combustión a pellet es coincidente con el aumento de estos dispositivos en el mercado local, lo que está aparejado a factores como la mayor disponibilidad del combustible, menores precios y más variedad de marcas de equipos, programas públicos como los recambios de calefactores, y vencimiento de los plazos de mantención.
“Parece lógico, así como con cualquier tipo de artefacto, que algunos pudieran tener una falla de fábrica, o un mal funcionamiento; pero si como en todo orden de cosas, la cantidad aumenta, las probabilidades de fallas también aumentan”, sentenció.
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