Por Vasti Abarca
Desde hace dos semanas y en pleno invierno, las largas filas para poder comprar pellet se transformaron en una realidad cotidiana en la región, sobre todo en Osorno.
Filas desde la madrugada con decenas de personas esperando a bajas temperaturas la apertura de los puntos que cuentan con el insumo que por estos días escasea, mantienen en alerta a la zona sur del país, mientras la ciudadanía pide soluciones a las autoridades.
La demanda de pellet ha ido en aumento con el Programa Recambio de Calefactores que impulsa el Ministerio de Medio Ambiente, especialmente con el llamado que busca a cambiar la leña por pellet en zonas declaradas saturadas por material particulado.
Sin embargo, el plan comenzó a ser cuestionado, dado que el reclamado desabastecimiento se produce cuando el recambio a pellet en las viviendas no está ni remotamente cerca de la meta que se propone el ministerio.
Según datos de la Seremi de Medio Ambiente Los Lagos, el objetivo es lograr el recambio de 25 mil calefactores, y hasta la fecha, se ha alcanzado solo un 24% de esta meta.
Aunque el proceso avanza lento desde que comenzó en 2016, la demanda por pellet ya supera la oferta, y no pareciera verse matizada por estos bajos números de recambio.
El programa estatal ofrece el recambio de un artefacto del tipo “salamandra, cocina, hechizo, cámara simple y calefactores con templador”.
La promesa en Osorno es renovar con calefactores a pellet de una potencia entre 6,1 Kw a 7,9 Kw, que en el mercado se pueden encontrar por alrededor de 800 mil pesos, mientras que el programa establece un copago de 130 mil pesos, que se puede pagar con tarjeta de crédito y hasta en seis cuotas sin interés.
Según detalla el Ministerio de Medio Ambiente, el objetivo de este programa “es disminuir las emisiones contaminantes al aire, a través del recambio de calefactores a leña, instalados en viviendas (…) por calefactores más eficientes y menos contaminantes".
Para Carmen Leyton, ingeniera de Proyectos y Estudios del Centro de Sistemas Públicos (CSP) de la Universidad de Chile, el programa estatal tiene un buen fin, pero con deficiencias.
Leyton explica a Grupo DiarioSur que entre 2018 y 2019, el CSP realizó un estudio encargado por la Dirección de Presupuestos de Chile (Dipres), donde se identificó que el plan de recambio avanza de manera lenta en las “ciudades más críticas”, como Osorno y Coyhaique.
“Ocurría porque lo que se hacía en ese tiempo era cambiar un artefacto absolutamente rudimentario de calefacción por una estufa a pellet que en el fondo ambientalmente son mucho mejores, pero requieren un montón de condiciones como el abastecimiento de pellet”, explica.
Leyton explica que entre las recomendaciones que se hicieron, estuvo el “no solo apuntar hacia medidas de calefacción que fueran en contra de todo lo que sea madera”.
“En ese sentido propusimos que se evaluara la posibilidad de hacer una estrategia mixta con estufas o calefactores que pudieran utilizar madera seca junto con estas otras estufas a pellet y las eléctricas”, asegura.
Cifras de la Seremi de Energía de la región, indican que solo el 8% de las viviendas urbanas consumen pellet en Los Lagos, a un promedio de 1.583 kilos/año.
En ese sentido, la seremi de Energía regional, Liliana Alarcón, sostiene que según el informe de “Consumo de leña y otros biocombustibles sólidos en la región de Los Lagos”, elaborado por el Instituto Forestal (2021), el 12% de las viviendas de Puerto Montt consumen pellets para calefacción a un promedio de 1.630 kilos por vivienda al año.
"En el caso de la ciudad de Osorno, el 10% de las viviendas consumen pellets para calefacción, a un promedio de 1.534 kilos al año, mientras que en las ciudades intermedias, el 8% de las viviendas consumen pellets para calefacción, a un promedio de 1.540 kilos al año”, detalla a Grupo DiarioSur.
Según Leyton, el estudio realizado por CSP, identificó que “no solo la tasa de avance del programa de recambio de calefactores era un punto crítico, sino también las condiciones de las viviendas de las personas de los lugares más sureños y australes”.
“Yo creo que muchas personas que hicieron el recambio a pellet ahora están pensando en volver a la calefacción más tradicional”, asegura.
La Asociación Chilena de Biomasa (AChBIOM) ha explicado que la escasez de pellet se debe a la menor producción de este producto en la zona centro sur, debido a la baja actividad de la industria maderera aserrada, lo que se tradujo en la falta de materia prima para combustible, como aserrín y virutas.
La asociación también agregó como un factor de la escasez, la problemática que se registra en la macrozona sur con los hechos de violencia.
En este contexto, el director de la Escuela de Ingeniería en Conservación de Recursos Naturales de la Universidad Austral, Francisco Burgos, puntualiza en que la producción de pellet está concentrada en una región, por lo que ve complicado el futuro si no se diversifica la oferta con mayor fuerza.
“El pellet se fabrica en la Región del Biobío y la materia prima proviene de la industria de la madera, no de la industria forestal, viene de una troza y una tabla por ejemplo”, asegura a Grupo DiarioSur.
“En el Biobío hay muchas empresas que exportan madera, por lo tanto tienen mucho de ese residuo”, agrega Burgos, apuntando a que se trata de una ventaja para el Biobío pero no para otras regiones como Los Lagos o Los Ríos.
En ese sentido, Leyton propone que “lo que se debe asegurar es diversificar el mercado de proveedores”.
“Que esté focalizado solo en el Biobío no es muy sustentable tampoco en términos ambientales por el tema del transporte y obviamente los problemas de desabastecimiento que se están generando”, sostiene.
Leyton dice que “es una medida que se debe evaluar en términos de costo/efectividad para ver si realmente hay que seguir esta estrategia o cambiar a otra que puedan avanzar en conjunto, como una política pública para mejorar la aislación”.
En tanto, el ministro de Energía, Claudio Huepe, ha explicado que actualmente hay una “una relativamente baja en la producción”.
Se trata "del 8% por debajo del objetivo ideal que deberíamos tener, y por lo tanto efectivamente las personas están teniendo algunas dificultades para acceder al pellets”, dijo hace unos días.
Por su parte, Antonio Minte, gerente de la Asociación Chilena de Biomasa, ha entregado su punto de vista sobre las razones detrás de la problemática.
“Lamentablemente, estamos viendo un periodo de restricción de materia prima para la industria del pellet y eso nos ha llevado a disminuir la producción. Entonces llegando el invierno se ha traducido, debido a la alta demanda, en la falta de stock, lo cual hace que dependamos 100% de la distribución y producción diaria", explicó.
En este contexto, frente al local de Ecomas, ubicado a cuadra y media de calle Los Carrera, las filas son el panorama de cada día.
“Acá hay que llegar temprano y hacer la fila, porque a las 8:30 entregan 150 números y venden un máximo de diez bolsas por persona, para que más gente pueda comprar. Me parece lógico”, explicó José Morales a Diario de Osorno mientras hacía la fila.
Por su parte, Rocío González, contó que llega a las cinco de la mañana a esperar por atención y comenta que usa pellet desde hace un año. El lunes 11 de julio hubo escasez total de este producto, así que tuvo que hacer el sacrificio de llegar en las mañanas, relató ese mismo día.
“Por comodidad es mejor el pellet, pero por la escasez ya estoy pensando casi en volver a la leña”, reconoció.
La situación no solo complica a los habitantes de Osorno, también afecta a las regiones cercanas como Los Ríos.
Cecilia López es una de las arrepentidas del uso de pellet como calefacción en su casa en La Unión. Comenta que tenía una combustión lenta que alimentaba con leña y que cumplía con su misión, pero la cambió.
“No hay pellet y para tener una casa calefaccionada, debes contar con una buena carga. Volví a la antigua combustión lenta. Ahora no la cambio. Uno enciende el fuego, coloca un trozo de leña grueso y el calor se mantiene”, dice a Grupo DiarioSur.
Pensando en soluciones posibles, la ingeniera Leyton propone “sumar las briquetas” al panorama energético de los hogares.
“Las briquetas que son una opción de madera comprimida que no es tan específica como el pellet, que tiene estándares específicos. Las briquetas son material que se genera a partir de la misma madera que está un poco más comprimida”, explica.
"Se podría considerar a distintos aserraderos o donde se pueda dar una vuelta en términos de economía circular, por ejemplo, donde estos restos de madera podrían ser un desecho, talvez vincularlo con otra industria y otros proveedores para poder hacer estas briquetas como punto medio", agrega.
“Me parece que esa podría ser una solución de corto a mediano plazo, fomentar el uso de las briquetas”, concluye.
“Como Seremi de Energía, estamos desarrollando estrategias con la Asociación Chilena de Biomasa para poder volver a tener un abastecimiento normal de pellet en la región", aseguró Alarcón la semana pasada.
"Por esta razón, estamos visitando a las plantas productoras de este producto y, además, monitoreando el abastecimiento en la región”, agregó.
Por su parte, Antonio Minte, gerente de la Asociación Chilena de Biomasa, ha hecho un “llamado a la tranquilidad dentro de lo posible”.
"Entendemos la problemática actual. No se ha parado la producción a nivel nacional, llegará todos los días a todas las ciudades, en especial a la región de Los Lagos, porque es la de mayor consumo en el país”, sostuvo.
Según estimaciones del Ministerio de Energía, el precio del pellet puede variar entre los 3 mil 700 pesos a los 4 mil 990 pesos en locales establecidos, dependiendo de la marca y la cantidad de kilos, debido a que existen en el mercado bolsas que van desde los 15 a los 20 kilogramos.
Ante este escenario, Alarcón informó la semana pasada sobre la apertura de un nuevo punto de venta de pellet en Osorno, lo que generó alta expectativa.
Así, la mañana del domingo recién pasado, se realizó un punto de venta de pellet en el sector de Rahue Alto, sector Mirasur, generando nuevamente una gran fila para adquirir el escaso producto.
A través de redes sociales y cerca de la medianoche, la tienda La Granja de Osorno dio aviso de esta venta, por lo que muchas personas llegaron muy temprano hasta el lugar, teniendo que esperar hasta las 10:00 de la mañana para que se les entregara un número de atención.
Ese día, Eliana Rivera, dijo a Diario de Osorno que se le acabó su reserva de pellet y por primera vez debió esperar desde las 7:30 horas, apremiada para poder calefaccionar su hogar, donde la esperaba su esposo en recuperación tras una cirugía.
“Necesito el pellet porque tengo a mi esposo operado del corazón y es la única calefacción que tenemos, y en este momento yo soy el sustento del hogar”, comentó.
La seremi Alarcón informó que la semana pasada llegó un 25% más de camiones en comparación con la semana anterior, pero igualmente se tomarán otras medidas para aumentar el abastecimiento.
Por su parte el subsecretario de Energía, Julio Maturana, entregó recomendaciones.
“Es importante priorizar la compra de pellet envasado, con etiquetado claro y de marcas establecidas, evitando comprar pellet a granel y sin conocer su procedencia”, aseguró al anunciar hace dos semanas las restricciones en la venta de pellet.
Por último, si la comunidad detecta sobreprecios en este combustible o situaciones de acaparamiento, deben denunciar ante la Fiscalía Nacional Económica, expresó el subsecretario en ese momento.
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